LA BALANZA DE LA VIDA...

... nunca olvida el peso del otro lado. Nada es lo que parece. Yo no soy sólo este blog, no sólo soy esa tristeza que a veces sale, que flota a su libre albedrío. También soy la risa, esa chispa inmortal que tira de nosotros simplemente porque las personas a las que queremos ríen. Y también río, ya lo creo. Somos tantas cosas, tenemos tantas caras. Y por cada lágrima derramada, siempre un carretillo de risas.

Eso es lo que tiene la mirada del otro; la chispa inmortal de la risa. Los ojos de diminuta son así... que pueden con todo con una simple mirada. Hoy ha encontrado esto por internet. Aquí lo dejo. Es una gran suerte su presencia a mi lado. Soy afortunada. Y también lo soy por todos vosotros... ahí al otro lado. Empujando, preguntando y haciendo ruido. Sois geniales.

7 comentarios:

  1. Tu grandeza es tener lugar para la sonrisa, y es obvio que tu diminuta a aprendido de ti a encontrar cosas hermosas. Un abrazo de los que aprietan.

    ResponderEliminar
  2. ...cuando quieras pintar tu casa,
    A V I S A ! ! ! Forpi!!!

    Lo haremos de esa manera, me apunto...y aprovecharemos a Diminuta para pintar las esquinas...

    Por cierto la canción My Way (Sinatra) me ha recordado la versión de los Sex Pistols...

    Es que en este blog, uno lo pasa biennnnnnn

    y de palabro amsen! que es como amén pero con un poco de juerga! yeha!!!

    ResponderEliminar
  3. Es que a veces nos cegamos y no vemos el otro plato de la balanza. Gracias por esta consideración.

    ... y Feliz semana¡¡¡

    ResponderEliminar
  4. Por supuesto tú eres más, mucho, muchísimo más... Tan bella es tu tristeza como tu chispeante alegría. Todo lo que procede de ti lo es. Besos miles

    ResponderEliminar
  5. Creo que a estos humanos que somos, a veces no los apreciamos al completo y no recordamos que tenemos cabida para muchas más cosas de las que creemos y este manojo de sentimientos contradictorios que somos, resulta maravilloso tanto en las alegrías como en las tristezas porque ambas son parte de nosotros aunque a veces las apartamos y las sentimos como vecinas molestas. Tú, eres mucha tú, querida ana y además te complementas con otro ser que te ayuda a levantarte cuando hay días que te quieres dejar guardada la sonrisa en un cajón. Besos para ti y para ella también.

    ResponderEliminar
  6. Querida Ana. Querida Ana... Es ya tarde y quería decirte que te quiero mucho. Tanto si lloras, como si te pones brava... Cuando te ríes eres la bomba. Lloro de risa contigo. Porque mira que eres leonesa, querida leonesa...

    Bssssssssssssssss

    ResponderEliminar
  7. Sois unos soletes muyyyyy gorrrrdotessssss....

    ... gracias por estar.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar