EL ALMA EN VERANO.
"Siempre me ha gustado tumbarme mirando al techo, es mi preparación para soñar, para calmarme o para decidir cualquier cosa. Y cuanto más espacio medie entre los ojos y la tapia contra la que se estrellan, más libre es el viaje del pensamiento, más sorpresas puede dar." CMG
Me gusta esa sensación de dejar volar los pensamientos. Bonita entrada!
ResponderEliminarAhí estamos... en busca de inspiración de pintura de techo :-) Felices vacaciones
ResponderEliminarSabias palabras, sin duda. Y dejarlos campar a sus anchas por la estancia sin dejar que ninguno de ellos nos martirice
ResponderEliminarUn abrazo