DE REGRESO.











El hombre se inventa un programa de vida, una figura estática de ser, que responde satisfactoriamente a las dificultades que la circunstancia le plantea. Ensaya esa figura de vida, intenta realizar ese personaje imaginario que ha resuelto ser. Se embarca ilusionado en ese ensayo y hace a fondo la experiencia de él. Esto quiere decir que llega a creer profundamente que ese personaje es su verdadero ser. ORTEGA Y GASSET.

Es el momento, ya no queda otra que volver a tocar el suelo de la realidad; admitir el kilómetro cero que es una nueva andadura, una nueva programación, un diferente caminar aunque en esencia se camine igual. El otoño siempre es inicio de año en mi tiempo, pero este actual lo es de manera especial. Se cierra un ciclo y se abre otro. Comienza una nueva etapa que tiene la emoción de las cosas que están por estrenar y la incertidumbre que es poner el pie en un camino desconocido. Toca sentarse a diseccionar la realidad. A repensar los proyectos, a no divagar.

Se termina permanecer en el aire, en lecturas y sonidos que nos elevaban por encima de lo cotidiano aunque lo cotidiano haya seguido siendo labor. La inconsistencia no habitaba tanto en los hechos como en el pensamiento; ese dejarse volar sin afrontar lo rotundo que tiene el alma cuando se siente de vacaciones. El dejarse acunar por una rutina amable, de sonido cascabelero y con reminiscencias sólo de presente, risas, idas y venidas, sin más objeto que disfrutar. Hoy ya toca regresar. Se acabaron las vacaciones.

Hoy _por fin_ me coloco firme pies en tierra. Mi presente ha de conjugarse y obligarse a mirar al futuro. He de proyectar mi mirada en pilares que construyan lo no habitado aún. Se acaba la levedad del ser, la no rentabilidad de los hechos y la necesidad de no despertar.

... Y parece que lo he hecho animadamente. Con ganas de participar en un presente activo que me haga dar pasos con un futuro posible. Todo ello sin perder la conciencia de que de mi no todo dependerá, aunque es bien cierto que ello no le quite pizca a la seguridad que me inunda. Al final todo sale como tiene que salir, aunque no siempre coincide con lo que se tenía pensado.

Bienvenido sea este otoño, y también el kilómetro cero en el que me he ido a colocar. Estamos de regreso y hago mi propuesta... que luego la Vida dirá.

VACACIONES.

Nos vamos...
Diminuta ha regresado ruidosa, alegre e incombustible.
:P


26 DE JULIO.

FELICIDADES A TODAS LAS ANAS DE MI VIDA.

Santa Ana y María. Pintura de Leonardo da Vinci.




El corazón no es fuego. Es como un espacio que dentro de la persona se abre para dar acogida a ciertas realidades. Lugar donde se albergan los sentimientos inextricables, que saltan por encima de juicios y de lo que puede explicarse.

(...)

Y a veces arde en él una LLAMA que sirve de guía en las situaciones difíciles, una luz propia que permite abrirse paso allí donde parecía no haber paso alguno; descubrir los poros de la realidad cuando se muestra del todo cerrada.
María Zambrano.




*En recuerdo de esa LLAMA que vino a posarse en cada una de mis derrotas.

ÁRBOLES.


El camino que recorremos en este tiempo llamado vida, lo único que pone a prueba es la coherencia entre nuestra libertad y la responsabilidad que de su mano asumimos. Da sentido a lo que decimos y demostramos. La vida es demasiado inteligente como para dejarse manipular. El final será el que nosotros hayamos elaborado de la mano de esa libertad, a pesar de los bosques encontrados, del miedo vivido y de las sombras por alumbrar. Siempre hay árboles sólidos al lado, otra cosa es que hayan pasado de largo sin haberlos visto o que no los hayamos sabido cuidar. La vida es un enorme incógnita por descubrir: seamos coherentes, vivamos en cohesión y disfrutemos de las agradables sombras que el camino siempre nos regala: los amigos*. Cuida a tus amigos, no les dejes marchar.


*Dedicado a todos y a cada uno de ellos.

EL ALMA EN VERANO.











"Siempre me ha gustado tumbarme mirando al techo, es mi preparación para soñar, para calmarme o para decidir cualquier cosa. Y cuanto más espacio medie entre los ojos y la tapia contra la que se estrellan, más libre es el viaje del pensamiento, más sorpresas puede dar." CMG

IRES, VENIRES Y TACONES.

Así estoy; voy, vengo, vuelvo a ir, vuelvo a regresar. Regreso a mi inconstancia, a mi locura, a mi ir y venir que parece no tener mucho sentido, la verdad. No hay manera de centrarse. Mi mente bulliciosa no encuentra recodo en el camino en el que parar, sigue, sigue, sigue... La casa es una pista de aterrizaje para todo aquello que tenga a bien aterrizar. La engalanan mil libros y otras mil tazas. No hay concentración, ni rutina, ni objetivo que conquistar. Todo es un ir y venir de la presencia, de la mente, sin agarrarse a nada concreto, nada tiene tiempo en el devenir de los días. Incluso la lectura no tiene riendas marcadas. El sueño también permanece a su libre albedrío. 

Sin embargo concibo este espacio de caos como un descanso, saber que nada es ni tiene que estar de ninguna manera concreta le da a mi espíritu alas, me hace tocar la libertad y me acerca poderosamenta a la verdad de mi vida. Ese fluir de las cosas tan anecdótico y aleatorio es una sabia nueva que en cierto sentido recoloca el mundo de mi mente. Sin obligaciones, la verdad se presenta nítida, grande, irrevocable y ligera. Podría volar con ella.

No saber a qué razón responden los hechos nos coloca ante la mirada de un yo que puja por salir verdadero, es una afrenta. El caos nos acerca a la Verdad. También a sus hijas directas: esas pequeñas verdades que vamos descubriendo mientras vivimos, de las que no somos del todo conscientes, y de las que no alcanzamos a ver a dónde nos pueden llevar. Hoy se muestran más rotundas que nunca:

_Creo rotundamente en Dios.  

_Soy, a pesar de mis tropezones, una persona enormemente feliz.

_ Y te estoy echando mucho de meeeeeeeenos, Diminuta. _De las personas que me rodean eres la que más necesitaba: ordenada, serena, profunda, tranquila, enigmática, poderosa, alegre y coqueta... . Eres la antítesis que da sentido y verdad a mi presencia caótica, deshilvanada, vehemente,  imprevisible y desconcentrada. Joooo... pero cómo te estoy echando de meeeenosss. Y una cosa, cuando veas los zapatos y la pamela que me he comprado... te vas a morirrrrrrrrrrrrr. De la envidia. Bueeeeeno, vaaaaleeee... te los dejo ponerrrrrr :)_

TE quiero DIMINUTA.