Pues sí, va a ser que sí. Que es así. Tendrás en tus manos el hijo que necesitas; el que te sacará de tus casillas, el que dejará todas tus teorías patas arriba, el que te hará llorar mares a su lado _y por detrás de él_ . Nunca te habías conocido tan vulnerable. Por tu hijo rezarás lo que no habías imaginado _a veces ni sabrás que estás rezando, pero rezas_.Y pasará la vida. Y crecerá. Y tu disminuirás. Y descubrirás que a su lado, te has convertido en mejor persona.
Esos peques espolean de una manera tan rotunda nuestras creencias, que lo que no queda arrasado es porque es esencial. A su lado somos conscientes de cuánta cacharrería innecesaria llenaba nuestras alforjas. Sólo ellos nos colocan con los pies en la tierra, e incluso a veces, con las mismas narices en el suelo _es lo que tiene saltar al vacío, no sabes muy bien cómo vas a caer_.
De la mano de nuestros hijos son muchas las teorías que se invalidan. Si no, que alguien me venga ahora diciendo eso de que "si tú lees ellos leen"... vamos, que se traga de un golpe certero el libro que lleve en la mano _y suelo leer aunténticos tochos, avisados están_. O esa otra que dice que la rutina, un ambiente relajado, zona de estudio, hábito diario... bla, bla, bla. Ja! Les puedo asegurar que hay musas que tienen superpoderes, y ya puedes establecer una rutina diaria con un ambiente de estudio y durante el tiempo que quieras, que la musa estará ahí, susurrante y cabezota, despertándo el mundo fantástico que tiene en el hemisferio derecho tu retoño. Y amigos, si el hemisferio derecho se despierta, den la tarde por perdida. No habrá manera. Y da igual que se respire buen ambiente. Y hablando de ambiente, recuerdo otra supuesta teoría; el éxito escolar en los niños es directamente proporcional al número de libros que hay en el hogar. Risa floja, oiga. Y para qué me voy a explicar.
Diminuta: Gracias; por el estrés que le has puesto a mi vida, por la cantidad de cosas que he tenido que colocar en la papelera con tu ayuda, por haber descubierto tan insistentemente tu hemisfeio derecho _que es magnífico y divertido_, por colocar el mundo del revés y sobretodo, por la sonrisa, la espontaneidad, y la tenacidad que le pones a tu vida. He aprendido mucho a tu lado, y me gustas así, tan libre... y tan pesadita. :P
¿Como decíamos ayer, leonesa? Hija mía qué gráfica... Tu diminuta y mi benjamina en sus tiempos hubieran hecho buenas migas. Se diría que sus hemisferios derechos están poblados de nubes que al menor aspaviento dibujan mil formas. Y yastá. Se acabó la concentración. Y entonces surgen historias de nubes atrapadas, columpios que no cuelgan de ninguna rama y mecen sus cabecitas con una libertad que, en el fondo, ya querríamos para nosotras. Shhhhh... que no despierten demasiado pronto. Para todo lo demás hay tiempo. Un beso, hedbana.
ResponderEliminarJajajjaja... sabes muy bien de qué estoy hablando, ¿verdad?. Un besazo Sunsi.
ResponderEliminar¡uuuyyyyy, que chiquilla que eres! No te queda nada. Ya verás, maja, ya verás cuando se confabule ese hemisferio derecho con el de al lado. En ese momento comienza en el cuerpo calloso un tráfico tan infernal como duradero. Te cuento, que tengo tres experiencias. En breve comenzará la irrefrenable necesidad de pasar de musaraña a contar y comentar musaraña. Ya no hay quien lo pare.
ResponderEliminarDel estado ausencia de mente, al de ausencia de preesencia.
Aterrizan irremediablemente sobre el teléfono. Horas y meses. Cuchicheos infinitos escondida como una gato.
Pero no te preocupes. En quince o veinte años, se asentará.
No se será lo que se ve, pero si escuchan y observan contradicciones, no podrán ser dichosos. No actuemos en la vida de la calle al revés de la vida que contamos en casa.
Eso no hay quien lo conjugue en paz.
Me has dejado un poco confundida... No creí merecer unos niños tan infinitamente preciosos como los que me han tocado. O es que en la aborrescencia me los cambian???
ResponderEliminarAy
Ay
Besos, nena
Qué razón tienes. Te dicen que el ejemplo es todo y durante un tiempo puede parecerlo, pero de pronto un día te encuentras con que te han vuelto a tu hijo del revés y no puedes hacer nada por cambiarlo. Qué te voy a contar... Un beso.
ResponderEliminarsi tus leen ellos leen, jajaja
ResponderEliminarpero por si acaso yo sigo leyendo.
Como te entiendo!
Las teorías son eso.
El amor es la única verdad.
Junto con buenas dosis de paciencia y sentido del humor.
Besos, también a Diminuta
Tenéis TOD@S una tarea en mi blog.
ResponderEliminarPasaros, corazones.