La soledad, aquella más pura no tocada por el afán de independencia ni por el sentimiento de encontrarse aislado, la soledad aceptada en el abandono recibe el don de la mirada remota que la sostiene. (...) La Presencia sin la cual ninguna presencia existiría, ninguna realidad tendría rostro, y ninguna verdad podría ser entrevista ni, por tanto, buscada.
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* Dos párrafos de la filósofa MARÍA ZAMBRANO hoy me sirven para reflejar en esta ventana la Luz.
Qué reflexión tan profunda. Un beso.
ResponderEliminarMuy bonito, Ana. Me sirve para buscar serenidad.
ResponderEliminarFeliz Pascua¡¡¡
La Soledad, a veces tan placentera...Pero a veces tan dolorosa...
ResponderEliminarSentirse sostenido por ese Hilo en la soledad... Qué grande, querida. Besos de mona de Pascua. Si te llegara en condiciones te mandaría un cachito.
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