Y si estuvieras aquí conmigo esta noche, yo sería feliz y tú lo sabes. Estaría mejor también la luna, ahora más pequeña que nunca. Se quedaría a un lado también la nostalgia que desde lejos regresa para llevarme. De nuestro amor sólo queda un rastro que el tiempo borrará. Nada sobrevivirá. No te olvides de cada una de mis costumbres,de mis gestos, de la forma de mis manos. Estuvimos juntos y no es un pequeño detalle. No te olvides nunca de mi, de esta historia que no ha sido escrita. A veces todo se consuma un poco, y sin preaviso se vá. No te olvides nunca de mí... mañana.
No sé qué hilo has tirado para que salga ese sentimiento, pero su música es la nostalgia, y su olor se parece un poco al de la tristeza... un beso
ResponderEliminarNo Pesolet, yo lo identificaría más como añoranza: esa necesidad que tenemos de no olvido. No queremos que los amigos nos olviden nunca.
ResponderEliminarUn abrazo Pesoleta.
;)
¡Pues yo me acuerdo! :-))
ResponderEliminarLo sé.
ResponderEliminar:)
Anita. Gracias por este remanso de paz. Siempre llega después de la tormenta.
ResponderEliminarCreo que cae en el olvido lo que no te ha dejado huella...lo que ha pasado por ti sin que te haya rozado. Algunos podrán olvidar...ma io non dimenticherò mai...MAI
Un beso, amiga leonesa.
Ana, hay determadas cosas que por muy poco que duren, pero poco poco poco, no se olvidan nunca nunca nuca, sinó es que duró nada. bss!
ResponderEliminarEl sentimiento que expresas, está instalado en mi corazón, por una pérdida reciente...espero que nunca se olvide de mí.
ResponderEliminarUn abrazo bonita.
Sunsi, supongo que sí, que algunas cosas pasan a nuestro lado sin tan siquiera rozarnos... ¿podría ser que alguna fuera necesaria y no la sepamos sentir...?
ResponderEliminarNunca se sabe.
Yo tampoco olvido.
Un beso.
Tomae, hay cosas que no se olvidan nunca, aunque muy bien no sepamos dónde las hemos ido a colocar, aunque parezcan invisibles... están. Y no importa si vivieron un segundo o casi una eternidad. Estám. Un abrazo.
La pérdida de alguien nunca es olvido Marina. Sólo significa que no está físicamente cerca, pero que está, eso no lo dudes. No creo que se olvide de tí. Será imposible, y si no lo ves, el tiempo... da tiempo. Y lo verás.
:))))))))))
SI algo hay eterno son los reecuerdos, si hay algo que regalamos a perpetuidad son los sentimientos, luego el tiempo se encarga de reubicarlos adecuadamente, unas veces se eternizan, otras se diluyen.
ResponderEliminarUn abrazo
Bien.
ResponderEliminarDos posibilidades claras.
1. Guardar los recuerdos entre algodones y acariciar la añoranza con esmero.
2. Coger los recuerdos, tirarlos por la ventana e irse a saltar nuevas hogueras.
No seré yo quien te diga cual es la mejor opción.
Tan sólo hablaré de mis recuerdos.
Los tengo de dos tipos.
1. Las amistades, que deben ser guardadas y mimadas entre algodones; ya sean férreas y duras como el hierro forjado, ya blanditas y dúctiles como los sentimientos.
2. Los amores. Aquí no hay punto medio. En la guerra y en el amor todo está permitido.
Somos supervivientes en un mundo hostil.
Y condenados estamos a guerrear por un abrazo, por un amor.
Nunca daré mi opinión sobre qué hay que hacer.
Solo diré lo que viví.
O tal vez, lo que me falta por vivir.
Nadie sabe nada y a la vez, todos sabemos todo. Curioso.
Hay personas que aún viviendo con ellas poco tiempo dejan una huella en el alma, en el corazón que nada ni nadie puede borrar. Vivir es tener el alma llena de esas huellas: dan riqueza a nuestra existencia.
ResponderEliminarBesos miles
Todo, nada, nunca...cuánta intensidad les has dado a estas palabras tan comunes!
ResponderEliminarMientras tu no olvides, nunca te olvidarán amiga mía.
ResponderEliminarUn besazo!!
Gracias por pasarte por mi blog. Esa calma de la música me ha venido muy bien. Saludos.
ResponderEliminarSese, la vida nos va colocando, pero, mira que nos empeñamos en estar descolocados... jajaja. Un abrazo.
ResponderEliminarNadie sabe nada, diría yo... aunque creamos saber de todo.... ainnnsss. Un fuerte abrazo Driver.
Hay huellas enormes, y su tiempo a veces es de una sola tarde. Es cierto. Nuestras experiencias al lado del otro, su recuerdo, nos enriquece. Lola, un abrazo gordote.
Marta, esas palabras no son mías, son la letra de la canción. Me gustó mucho. Un beso.
Silvia, eres especial. Gracias por estar aquí. Gracias por tu presencia.
Colombine, bienvenida. Saludos. Sí, la canción tiene el don de la calma.