Nada nos puede ser indiferente. Si miramos de frente, nos encontramos con los ojos del otro. Ese otro que comparte las risas con nosotros, que la mayor parte de su tiempo pasa sin ser notado, que normalmente es uno más disfrutando de las cosas de la vida. Pero un día sucede, miras a los ojos, y ya no son los mismos. De repente los ves con toda su realidad, con todo su peso. Y entonces te haces consciente de que los ojos, todos, todos lloran. Cada uno en su momento, en su propio desierto, en su propia infinitud. Y entonces te sientes impotente porque tus manos pueden hacer muy poco.
La vida es una paradoja. Y en ella estamos sumergidos sin saber muy bien por dónde nos movemos. Cuando un día miramos de frente lo vemos: hay demasiados corazones sin consuelo. Pero para verlo, es necesario mirar.
La vida es una paradoja. Y en ella estamos sumergidos sin saber muy bien por dónde nos movemos. Cuando un día miramos de frente lo vemos: hay demasiados corazones sin consuelo. Pero para verlo, es necesario mirar.
(...)
Percepción; esa capacidad que perfila la consistencia de los sentimientos, que es capaz de ver lo profundo en la mirada de las personas que pasan a nuestro lado.
Empatía; la capacidad para poder sentir lo que sienten los otros. Capacidad para sentirse en la circunstancia del otro, el dolor por su dolor.
Generosidad; saber desprenderse de nuestro tiempo. Dárselo íntegramente a los otros.
Empatía; la capacidad para poder sentir lo que sienten los otros. Capacidad para sentirse en la circunstancia del otro, el dolor por su dolor.
Generosidad; saber desprenderse de nuestro tiempo. Dárselo íntegramente a los otros.
It's not my style.
It's not my way.
To see the future. (...)
Hay que saber mirar, y ver esos corazones sin consuelo.
ResponderEliminarPero también es importante saber consolarse, o consolarse cuando el propio está desconsolado.
Sonríe, Ana!!! También hay muchos corazones alegres!!!!!
Besos, guapa
Me ves triste Rocío?
ResponderEliminarNo... no lo estoy. Pero vivo al lado de gente que sí lo está. Y no es fácil mirar para otro lado... nada fácil.
Besos.
Y gracias... muchas gracias.
¿Mirar para otro lado? No, Ana. Nunca.
ResponderEliminarPero mirar a ese lado con una sonrisa, para transmitir el consuelo.
Besos
El consuelo siempre... sí...
ResponderEliminarojalá siempre estuviera en nuestras manos...
... gracias Rocío.
;))