Ana... qué lejos me queda esta parte tan tierna de los hijos. Me ha gustado mucho el enfoque. Una razón para tenerlos: ellos. Cómo nos cambian la vida ellos. Muchas de las veces nos hacen la vida divertida... o, por lo menos, nada... pero nada rutinaria...A veces te hacen saltar de la silla, otras acaban con tu saliva o con tus cuerdas vocales "¿por qué, mamá,por qué?"... En la dicha esos abrazos de oso que te crujen... y también en la desdicha...con lágrimas incluidas.
Vas a la zapatería. Deme unas deportivas para la niña. ¿Qué número? ¿Niña, qué número usas? ... La niña te mira con inocencia infantil. Da el dato a pleno pulmón. Que se enteren los vientos y las nubes, que se sepa allende el mar,vengo empujando, con las velas sobre la mar.
Un treinta y nueve. ... Miras tu pie de gigante, y por un momento te parece pequeño.
Vienen empujando. Sin gritar, pero empujando. Desplegado el velamen. ... Sin nada que ocultar.
Driver, su esencia supongo que es esa... la de venir empujando. Tienen que conseguir vernos pequeños para poder hacerse grandes, para sentirse crecer... así que la primera percepción que se nos queda es esa, su instinto hecho de empuje, fuerza... su ilusión por ser mayor y por supuesto, mejores que nosotros... eso por supuesto siempre. Y nosotros que lo sabemos, que sabemos que así es.... emocionados. Así debe ser.
Lolo, esta fase de junio es mejor ¿eh?... ya no lloramos de la impotencia, lloramos de la emoción... ;)) Espero que descanséis todos, especialmente tú, y que a ratillos sigas asomando por aquí durante este periodo estival.
Ana... qué lejos me queda esta parte tan tierna de los hijos. Me ha gustado mucho el enfoque. Una razón para tenerlos: ellos. Cómo nos cambian la vida ellos. Muchas de las veces nos hacen la vida divertida... o, por lo menos, nada... pero nada rutinaria...A veces te hacen saltar de la silla, otras acaban con tu saliva o con tus cuerdas vocales "¿por qué, mamá,por qué?"... En la dicha esos abrazos de oso que te crujen... y también en la desdicha...con lágrimas incluidas.
ResponderEliminarSin ellos nada es lo mismo.
Precioso vídeo.
Besos
No están tan lejos, si cierras un poquillos los ojos... las podrías tocar.
ResponderEliminarYa nada es lo mismo. Nada.
Es precioso el video, Ana!
ResponderEliminarLos peques hacen que las cosas sean mejores... ;))
ResponderEliminar... vídeos incluídos.
Vas a la zapatería.
ResponderEliminarDeme unas deportivas para la niña.
¿Qué número?
¿Niña, qué número usas?
...
La niña te mira con inocencia infantil.
Da el dato a pleno pulmón.
Que se enteren los vientos y las nubes, que se sepa allende el mar,vengo empujando, con las velas sobre la mar.
Un treinta y nueve.
...
Miras tu pie de gigante, y por un momento te parece pequeño.
Vienen empujando.
Sin gritar, pero empujando.
Desplegado el velamen.
...
Sin nada que ocultar.
Voy a decirte una cosa Ana; jopé, me he puesto a llorar. Gracias.
ResponderEliminar(jopé lo he suavizado, que tu blog es más delicado que eso)
Driver, su esencia supongo que es esa... la de venir empujando. Tienen que conseguir vernos pequeños para poder hacerse grandes, para sentirse crecer... así que la primera percepción que se nos queda es esa, su instinto hecho de empuje, fuerza... su ilusión por ser mayor y por supuesto, mejores que nosotros... eso por supuesto siempre. Y nosotros que lo sabemos, que sabemos que así es.... emocionados. Así debe ser.
ResponderEliminarLolo, esta fase de junio es mejor ¿eh?... ya no lloramos de la impotencia, lloramos de la emoción... ;))
Espero que descanséis todos, especialmente tú, y que a ratillos sigas asomando por aquí durante este periodo estival.
Saludos.