Países: Portugal, Francia e Italia.
Año: 2003.
Interpretación: Leonor Silveira (Rosa María), John Malkovich (Capitán John Walesa), Catherine Deneuve (Delfina), Irene Papas (Helena), Stefania Sandrelli (Francesca), Luis Miguel Cintra (Actor portugués), Filipa Almeida (María Joana).
La película narra el viaje de Rosa con su hija. Rosa es profesora de Historia. El crucero les da la oportunidad de conocer las ruinas de Pompeya, Atenas, Estambul, las pirámides de Egipto. Es un viaje a través de la civilización mediterránea y una evocación de todo aquello que ha marcado nuestra cultura occidental. En el crucero, Rosa María conoce a tres mujeres y a un hombre que le van a impactar: una prestigiosa empresaria francesa, una famosa modelo italiana ya retirada, una actriz y profesora de canto griega y el capitán del barco, un americano de origen polaco.
En el salón del barco, cenan todos juntos en la mesa del capitán, cada uno habla en su lengua de origen y todos comprenden lo que el otro quiere decir en su propia lengua. La ilusión del no límite en lo expresado, en el entendimiento del otro que transciende a mi sonido, tan diferente del suyo.
La película te deja un nudo.
Y en un pensamiento, en esa necesidad que debemos cumplir, la de volver la vista al pasado, a los instantes que son nuestra raíz, que son todavía nuestro ayer, recordar el tiempo de las voces que nos precedieron. Hemos de encontrar la esperanza perdida, rescatar la visión de un orden del que nos sintamos formar parte. Y transcender... superar todo aquello que sólo en apariencia nos hace diferentes. Buscamos ser capaces de saciar esa necesidad universal que es pasión: la necesidad de comunicarse. Ser capaces de regalarse a un otro y de recibirlo a través de la palabra que es sonido.
Trascender.
ResponderEliminarBonita palabra.
Evoca al bípedo racional, que se yergue para otear el horizonte, y busca la respuesta a sus plegarias.
¿Dónde están las estrellas?
¿Quién me escucha cuando rezo?
¿Dónde reside la energía interna?
¿De qué lugar del universo proceden mis genes?
¿Cómo hemos de enfrentarnos a la muerte?
¿Dónde reside la esencia de la belleza?
...
Espero no tener nunca respuestas a estas preguntas.
Porque mientras las busco..., trasciendo.
Tal vez el camino sea lo más interesante de esta vida.
¿Las metas?
No te conformes con poco.
Olvídate de las metas.
...
Mientras que busques respuestas, estarás vivito y coleando.
Mientras que dudes, trasciendes.
En la duda está la esperanza.
Lo inequívoco está vacío de contenido.
...
Somos bípedos, diseñados para ser felices y trascender.
Aunque nos empeñemos en lo contrario.
Caray... tus palabras volanderas son toda una filosofía de vida.
ResponderEliminarMe quedo con la duda como casa de la esperanza... como peldaño para la transcendencia...
... a sabes que yo siempre me quedo con tus palabras volanderas o no.