AÑO 2000

Fue entonces cuando empecé a tener referencias de ese quien que verdaderamente soy. Ahí comenzó la medida de mí misma, de lo que yo soy capaz de dar. Desde entonces he valorado aún más lo que me dieron, y soy consciente de lo que doy. Mi tiempo, ese que es de los demás, eso es lo que más me hace sentir alguien. Gracias, Sunsi, por esta pequeña mirada con perspectiva que da alas a la imaginación. Y porque has sido capaz de ver los adentros de ese paso de silencio que cada día avanza un poco más, pasos que tú también das. Pasos sin sonido. Tú también sabes de silencios.

Y... si por un casual imagino a mi diminuta ana haciendo repaso de mis referencias... pues eso, emoción contenida. Es bueno dejar así de libre la imaginación a veces, pues no es fácil el camino. E imagino s
u voz como un engranaje más de la vida, de la rueda de la vida. Y en su voz, mi tiempo. El que le supe regalar... Ahí están de nuevo los adentros, aquello que nos mueve, que nos hace avanzar. Esos adentros que empujan nuestros pasos de silencio, con los que caminamos a pesar de la incertidumbre, con los que avanzamos libres. Sabemos que nada nos es debido. Que caminamos a ese lado porque nos da la gana, la real gana. Y entonces, entonces es cuando más recuerdo la presencia de mis padres.


* a todas ellas, a todas y cada una, únicas.

9 comentarios:

  1. En algun momento hechas la vista atras y te das cuenta que una persona es lo que han sido sus referencias. En mi caso mis padres han sido una referencia constante.

    Ojala mi hija pueda llegar a esa conclusion tambien...algun dia.

    un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Cada día entiendo menos de lo que se habla aquí, me siento extraño, marciano entre vosotros, no entiendo nada de lo que se dice aquí, mi lenguaje es otro, no entiendo nada..., me voy a dormir...

    Buenas noches.

    ResponderEliminar
  3. !Qué importantes son esas referencias en nuestras vidas¡ Aunque tardemos en darnos cuenta... Y sí, como dice Alfonso, los padres son una referencia constante... Besos, Ana.

    ResponderEliminar
  4. Buenas noches, Ana. Ya ves... No puedo dormir.
    Si pregunto por tus referencias a Anita dentro de unos años... seguro que dirá: tenía genio, pero ¡qué quieres! estaba sola, tiró sola del carro... Cuando tenía una duda o me asaltaban preguntas sin respuesta... ella siempre estaba...aunque hubiera tenido guardia y su ojeras le llegaran hasta el suelo. Cuando forcejeaba e intentaba marcar un pulso, fue firme. Nunca se dejó manipular. Es genial, lista, culta, sensible...Ella me amó. ¿Te parecen pocas estas referencias?

    Y le diría a Anita... eso no son referencias... Es el mejor currículum.

    Nuestras referencias son nuestras raíces y , muchas veces, nuestro asidero. Yo doy gracias por tenerlas. Ojalá sepa pasar el testigo.

    Bsssss, Ana de León.

    ResponderEliminar
  5. La raíz, sólo quiero ser su raíz.
    Y que puedan agarrarse a mí cuando lo necesiten.

    No quiero que me defiendan ante nadie; prefiero ser su raíz.

    ResponderEliminar
  6. Alfonso, Rocío, es cierto, sin nuestros padres, seríamos la mitad de la mitad. Hemos sido afortunados. Aunque lo hayamos descubierto tarde, a veces, lo somos.

    Ginesillo, supongo que todo en cada uno de nosotros se torna complicado, que somos complicados quizá, y siento que no me puedas entender... y si te vas, te echaré de menos. Aunque no me entiendas. Espero que hayas podido descansar.

    Sunsi... todo imaginado está muy bien... jajajajaja. Una cosa está clara... que la quiero, y la quiero libre. Punto y final.

    Lolo, que se agarren siempre que lo necesiten, siempre, que nunca callen... sólo eso nos dejará tranquilos. Ese saber que ellos saben que estamos. Un beso.

    ResponderEliminar
  7. salamandra : yo soy de ciencias , la literatura y la filosofia no es mi fuerte,pero me imagino que ana teje entre " en busca del tiempo perdido y el tiempo recobrado " y lo hace tan bien que me emociona siempre.Aunque yo creo que nunca se perdió ningun tiempo.
    gracias , ana.
    consuelo

    ResponderEliminar
  8. Consuelo, te leo, y siento que tus palabras me quedan grandes... me ha encantado eso del tiempo perdido y el tiempo recobrado... Supongo que se trata de algo así, de reencontrarnos en nuestro tiempo creador, sea pasado o sea presente... y que por algo así, escribimos.. un intento para que nada quede del todo perdido.

    Me gusta que estés al otro lado.
    Un beso.

    ResponderEliminar